Antonio Gritón

Las Flores Nacen en Silencio

(Una exposición acerca del Movimiento Socialista Armado Mexicano)

El Quinto Piso
Venustiano Carranza 70-5°
Centro Histórico
Del 30 de Junio al 20 de Julio del 2018


Al terminar el mural Flor en la UAM Azcapozalco, continué investigando sobre el genocidio que cometió el Estado Mexicano entre los años 60, 70 y 80 en contra de estudiantes y campesinos al asesinar y desaparecer a más de tres mil de éstos. Realmente aún hoy en día todo lo sucedido en esos años se encuentra un tanto oculto, silenciado, como si se quisiera que pasara desapercibido.

 

Afortunadamente, de unos cuántos años para acá han comenzado a emerger diversas publicaciones que corren el velo con que el estado ha cubierto esos años y nos muestran diversos aspectos del llamado Movimiento Armado Socialista Mexicano y de la ignominiosa respuesta del Estado, como lo son la tesis de licenciatura (PDF) y la tesis de maestría (PDF) de la historiadora Adela Cedillo, asi como su bitácora de hechos (PDF) que va de 1958 a 1982.

 

Al comenzar a leer la bitácora de hechos realizada por Adela , comienza uno a descubrir la magnitud del genocidio, la irracional violencia del estado y muchas de las historias de los jóvenes y campesinos que se levantaron en armas al encontrarse con un estado al que democráticamente no se le podían reglamar sus grandes injusticias en torno al reparto de tierras.


Para los Mayas, hay personas que nacen de las flores. En su tesis, la maestra Cedillo menciona que muchos de los grupos que se levantaron en armas nacieron en silencio . Después de leer parte de las vidas de algunos de los miembros de los grupos armados, pienso que todos ellos son realmente héroes, héroes que enfrentaron a un violento y encolerizado estado mexicano y que murieron las más de las veces. Todos ellos y ellas nacieron de las flores, flores que nacen en silencio.


Así fue como surgió la temática de esta exposición en El Quinto Piso, temática que con la curaduría de Marco Aviña y Daniel Pérez Coronel fue delimitando y orientando mi producción de obra para esta exposición hasta alcanzar una propuesta desde la cuál la pintura ha despertado y catapultado diversos sucesos en torno a esta gran herida en la historia reciente de nuestro país.


Como parte de la exposición, realizamos dos conferencias y dos conciertos de música libre o de improvisación. De las conferencias, recuerdo que El Guaymas, miembro de la Liga Comunista 23 de Septiembre mencionó que en la Liga había alrededor de 2 mil combatientes, de los cuales únicamente sobreviven 10; los otros 1990 los mató y desapareció el estado. En su conferencia, el maestro Alberto Híjar, miembro de las Fuerzas de Liberación Nacional, mencionó un hecho paradójico: todos los archivos gubernamentales referentes a esos años se encuentran en una crujía de una prisión, la del Palacio Negro de Lecumberri, hoy Archivo General de la Nación; es decir, ni siquiera el gobierno mexicano quiso construir un edificio especial para albergar la memoria del país, el archivo de la nación, sino que optó por simplemente reacondicionar una prisión.

Hay una frase de Adela Cedillo de la cuál no me he podido olvidar: “...en el Archivo General de la Nación, en ocasiones, los documentos en los que se daba cuenta de las “confesiones” obtenidas bajo incruentas torturas de los muchachos y muchachas pertenecientes a los grupos armados, todavía conservan manchas de sangre”.

 

Este es el texto de Sala escrito por Daniel Pérez Coronel:

Las flores nacen en silencio.
Exhibición individual de Antonio Gritón.
Curaduria: Marco Aviña.
Texto: Daniel Pérezcoronel.


Las flores nacen en silencio.
#pinturaHermosa Ciudad de México a 29 de Junio de 2018.

Este altar es un espacio de utopía, es la voz en un pedazo de tierra y de memoria. Es una ventana a los ojos del campesino y del guerrillero, que lo dieron todo por un sueño y se convirtieron en semilla de transformación social. Germen que sembrado en tierra fértil dio a crecer las flores, y a nosotros nos tocó el fruto en forma de imagen, presencia y enseñanza. Hoy el silencio se antoja como un puente de flores, que se extiende del Mictlán hasta aquí, donde no solo recibimos a los vivos, sino también al espíritu de los caudillos, que se levantaron contra aquellos sentados en la silla del águila sin amor por la camiseta.


Antonio Gritón es un personaje del folclor mexicano, se le puede ver desde hace muchos años en las calles de la ciudad, gritando, marchando, hablando con la gente, recolectando y contando historias. Su trabajo se centra en la disciplina de la pintura como una forma de pensamiento y origen. Para Gritón la pintura es un punto de partida, es un pretexto para salir a derivar a las calles y hacer comunidad. La organización #pinturahermosa en esta ocasión se dió a la tarea de seleccionar algunas de las piezas más recientes del artista, referidas a narrativas sobre la llamada Guerra Sucia en México, con este nombre designamos al conjunto de medidas de represión, enfocadas en disolver los movimientos de oposición política y armada contra el estado mexicano (encarcelar, asesinar, ahumar o desaparecer). El proceso de producción e investigación que se enmarca en esta muestra propone que la obra refleje una revisión historiográfica y narrativas sobre el origen de los movimientos armados en México. Aproximadamente durante el periodo comprendido entre los años de 1969 al 1974, se desplegó en territorio Azteca una red de grupos y caudillos, cuya memoria heredamos en forma de transformación social, en forma de arte popular, en forma de flores y esperanza. Pero es importante para nosotros que la exhibición no solamente honre y de fé de la historia de estos caudillos originarios, sino que también sea una invitación abierta al espíritu de todas las incontables víctimas que nos siguen faltando a la fecha, a sus familiares y aquellos que siguen en la lucha. Porque la lucha se hereda como un destello de luz en medio de las sombras y cuando el águila silencia tan violentamente a sus hijos, la muerte también se pasa de generación en generación. Hoy en esta muestra-ofrenda rendimos tributo a todas y todos los caudillos para recordar que su lucha ha dado frutos, porque es fundamental saber, que si hoy disfrutamos de algunos privilegios sociales es gracias a ellos.

Imaginemos cosas chingonas, no le quiero recordar, querido lector, la larga lista de fallas de este país que más que república parece tienda de raya. No quiero tampoco hablar de nuestros traumas coloniales, ni del virus de discriminación por raza, clase y género, que llevamos cargando en la sangre. Mucho menos quiero mencionar que vivimos en una dictadura disfrazada de democracia a unos días de las elecciones del 2018. Lo que quiero es que nos imaginemos cosas chingonas, que nos hagamos una voz, que la solidaridad deje de ser un eslogan fascista para que nuestros sueños crezcan juntos como las flores. Como el sueño de ser dignos ciudadanos del mundo, más allá de nuestra nacionalidad, para volver a sentir amor y conexión con la tierra, porque ella no nos pertenece sino que nosotros le pertenecemos. Pero si hoy por hoy, nada de esto es posible, si todavía nos faltan, si desaparecen a nuestros estudiantes, si matan a nuestras mujeres, si no podemos decir lo que tenemos en la tripa sin miedo a represalias, nos queda reunirnos alrededor de la pintura del maestro que lanza al aire su grito silencioso. Si todavía hay quien prefiere la sequía, la plata y el plomo, si se prefiere eso a tener agua, música y flores, aunque la rabia y la sed de venganza nos oprima el pecho, los invito a fumar momentáneamente la pipa de la paz, para honrar a nuestros caídos y para recordar que todos esos tiranos deben de vivir con el corazón vacío y eso es mucho peor que la muerte.

Daniel Pérezcoronel